Featured Post

Indígenas obtienen su libertad, después de padecer tortura y 20 años de prisión sin pruebas

¡Dale Like, comparte y deja tus comentarios!
(09 de diciembre, 2016. Revolución TRESPUNTOCERO).- Esta semana, 20 años después de haber sido detenidos y torturados, Agustín Luna Valencia y Fortino Enríquez Hernández lograron su libertad. Ambos indígenas Loxichas fueron, junto con otros indígenas, acusados sin pruebas de haber pertenecido al Ejército Popular Revolucionario y realizar el ataque contra fuerzas de la Marina en Huatulco.
“A pesar de que se demostró que no fueron partícipes de tal ataque, el Estado mexicano, debido a que uno de los caídos del EPR tenía una identificación que lo relacionaba con la zona Loxicha y el Ejército desplegó una campaña de terror en contra de las comunidades indígenas Loxichas.
En dicha zona hubo decenas de detenciones arbitrarias, tortura, desaparecidos de manera forzada y ejecutados extrajudicialmente; así mismo se aplicó una estrategia paramilitar cuyo grupo de «Los entregadores» han mantenido el control de la zona mediante el terror”, explican las organizaciones civiles.
Agustín Luna Valencia fue condenado a la pena de 31 años de prisión, por los delitos de homicidio calificado y terrorismo. Fue detenido el 25 de septiembre de 1996. “Durante el tiempo que estuve al frente, hicimos diversas gestiones para que el gobierno del estado y el gobierno federal, atendieran las carencias de nuestro pueblo, apenas llevaba 9 meses en el cargo cuando me detuvieron arbitrariamente sin mostrar ninguna orden de aprehensión, involucrándome con el Ejercito Popular Revolucionario EPR acusándome de diversos delitos del fuero Federal.
Me llevaron a la Procuraduría General del Estado, de ahí me trasladaron a la Crucecita, Huatulco, donde me tuvieron secuestrado durante más de 48 horas, sin tomar alimentos, no me dieron permiso para comunicarme con mi familia, después de 72 horas, me dijeron los señores que me interrogaron, que no tenía derecho de mi libertad”, aseguró Luna en un testimonio.
El 28 de septiembre del mismo año lo trasladaron en avión a la Penitenciaría Central Del Estado, donde permaneció unos días, con malos tratos por parte de las autoridades principalmente de los custodios, “y el día 9 de octubre del mismo año sin saber él por qué me trasladaron al Reclusorio Oriente del Distrito Federal, donde estuve más de 10 meses, después nuevamente me trasladaron a la Penitenciaría Central Del Estado de Oaxaca, con fecha del 30 de julio de 1997, llegué a este centro penitenciario”.
En tanto, Fortino Enríquez Hernández, fue acusado penalmente de ser responsable de los delitos de homicidio calificado y de homicidio calificado en grado de tentativa imponiéndole una pena de 21 años de prisión por el primer delito y 18 meses de prisión por el delito de homicidio en grado de tentativa, descontándosele a cada uno de los delitos 16 años, ocho meses, 19 días.
De acuerdo a su testimonio, fue detenido junto con Agustín Luna Valencia, Isaías Ambrosio Ambrosio y Manuel Nicandro Ambrosio José, a bordo de una camioneta. ·Me empezaron a golpear; preguntándome por el grupo armado, qué donde se encuentran las armas, las torturas fueron físicas y psicológicas.
Me llevaron a mi casa la cual catearon violentamente sin orden de aprehensión, ni habiendo hallado nada empujaron a mi madre a mi hijito interrogándolos. Estuve siempre esposado y nunca me dijeron de comer, durante una noche fui interrogado tres veces y con torturas, golpeándome en diferentes partes del cuerpo para que yo me declarara culpable o acusando entre los mismo paisanos, obligándome a firmar hojas blancas.
Fui interrogado a través de torturas amenazado de muerte, el día 27 como a las 11 de la mañana fui a declarar según me dijeron que tenía un defensor que su papel más que nada fue de interrogarme y que al final nunca me dieron opción de darle lectura a unas hojas blancas y me obligaron a firmarlas”, señaló Fortino.
Fue la juez octavo de distrito Adriana Alejandra Ramos León, quien concedió la libertad preparatoria al expresidente municipal y al exsíndico de San Agustín Loxicha, Agustín Luna Valencia y Fortino Enríquez Hernández.
Los indígenas abandonaron la penitenciaría estatal alrededor de las 23 horas de este miércoles, aunque deberán cubrir, cada uno, 111 mil 252 pesos dentro de un lapso de 24 meses, para lo cual deberán exhibir, el día 3 de cada mes, la cantidad de 4 mil 630 pesos como “reparación del daño”.
Dentro del penal de Ixcotel todavía se encuentran Abraham García Ramírez, quien purga una pena de 30 años; Álvaro Sebastián Ramírez, 29 años, y Justino Hernández José, una de 23 años con 6 meses, mientras que en Etla se encuentra recluido Zacarías Pascual García López, sentenciado a 24 años de cárcel.
En su mayoría los indígenas presos fueron acusados de los delitos de conspiración, terrorismo, homicidio calificado y homicidio en grado de tentativa. Las “leyes nos mancharon y nos robaron 20 años de mi vida”, dijo entre lágrimas el expresidente municipal y, aunque lo acusaron de ser integrante del EPR, insistió en que nunca fueron parte del grupo insurgente.
En tanto Fortino Enríquez aseguró que le duele que al estar encarcelado injustamente no pudo enterrar a su madre ni a un hijo, aunque ahora quiere disfrutar de su familia.
¡Comenta, debate y comparte!, ¡Romper el cerco informativo, crear conciencia y promover el cambio verdadero, está en tus manos.

¡No te pierdas y comparte mi canal youtube
Por cierto, ¿Ya hiciste tu contribución económica?, ¡Espero tu apoyo para www.tiraderodelbote.com http://ow.ly/qbLIv