Featured Post

“En México matar periodistas se volvió costumbre; a gobierno no le interesa resolver crimen de Javier Valdez”

¡Dale Like, comparte y deja tus comentarios!
En Francia, los nombres de cuatro periodistas asesinados en México (Javier Valdés, Miroslava Breach, Cecilio Pineda y Maximino Hernández) fueron inscritos en una placa conmemorativa en un parque de la ciudad de Bayeux, en Normandía. Donde tiene lugar cada año un homenaje a los corresponsales de prensa de todo el mundo caídos en el ejercicio de su profesión.

Durante la ceremonia en el memorial, Griselda Triana, esposa de Javier Valdez, asesinado el 15 de mayo pasado, aseguró que México vive “tiempos violentos en los que matar periodistas se está volviendo costumbre”. En nuestro país, agregó, “hay un presidente, pero no hay gobierno”.

Triana agregó que, “ahora lo tengo que aceptar: al gobierno mexicano no le interesa ni está haciendo lo suficiente para que el crimen (de su marido) sea resuelto”. Además, hizo una semblanza de Javier Valdez, quien “en sus trabajos periodísticos y en cada libro que escribió, desnudó una realidad que quienes tienen en sus manos las riendas del país no quieren mirar ni resolver porque quienes mandan son otros. Javier no se dedicó a contar muertos; él se ocupó de visibilizar a las víctimas, de ponerles rostro y contar sus historias.

Y en el trabajo que realizó, con pasión y compromiso por más de dos décadas, están mujeres, hombres, niñez y juventud víctimas o huérfanas del narco, familias que escarban la tierra con sus propias manos en fosas clandestinas con la esperanza de encontrar a sus seres queridos desaparecidos, porque si ellas no lo hacen, nadie más lo hará”.

Añadió: “Javier no fue un periodista del silencio, y eso le costó la vida. El derecho a la libertad de expresión, decía él, no es un asunto solo de periodistas sino de toda la ciudadanía, y para defenderlo hay que ejercerlo. A Javier solo podrían silenciarlo si lo mataban, y lo lograron”.

Finalmente, citó las últimas líneas del texto postrer de Valdez, publicado en la antología Periodismo escrito con sangre: “El derecho a la libertad de expresión es un derecho ciudadano, un derecho humano y, vale la pena, en tiempos tan sombríos y convulsionados, levantar la palabra escrita y hablada, que muchos nos quieren arrebatar para imponernos el silencio. Para mí, dejar de escribir es morir; es dejar de caminar, de sentir, de experimentar la vida. El silencio es una forma de complicidad y de muerte. Y yo ni soy cómplice ni estoy muerto”.

¡Comenta, debate y comparte!, ¡Romper el cerco informativo, crear conciencia y promover el cambio verdadero, está en tus manos.

¡No te pierdas y comparte mi canal youtube

Por cierto, ¿Ya hiciste tu contribución económica?, ¡Espero tu apoyo para www.tiraderodelbote.com http://ow.ly/qbLIv