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Fotografía: especial
■ México, D.F:- La consigna del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) para las elecciones del 1 de julio es clara: el voto cruzado por Nueva Alianza (Panal) para diputados y senadores, y por el PRI para Presidente de la República.
El ejemplo lo ha dado el mismo yerno de Elba Esther Gordillo, Fernando González Sánchez, candidato del Panal al Senado por Sinaloa, y quien en su campaña se ha pronunciado abiertamente por hacer ese cruce de votos para los próximos comicios.
El pasado 13 de abril, en la radiodifurosa Línea Directa, de Culiacán, Sinaloa, González respondió a una pregunta sobre si votaría por el candidato priista: “Así lo haré, claro porque es lo que creo y es mi convicción y en el caso de senadores y diputados voy a votar por Nueva Alianza... Enrique Peña Nieto tiene el mejor perfil político, por eso voy a votar por él”.
La académica del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM, Aurora Loyo, quien ha dedicado parte de su trabajo a estudiar la estructura del sindicalismo docente, señaló que esa combinación de partidos y candidatos muestra que existe una estrategia de intereses.
“La dirigencia del sindicato tiene un objetivo muy claro: que el Panal conserve su registro, que ya lo tiene en la bolsa, porque la campaña cacha-votos de Quadri ha tenido eficacia, pero además existe otro tipo de alianza estratégica con el PRI, especialmente con la candidatura de Enrique Peña Nieto”, aseveró la investigadora de la Universidad Nacional.
En entrevista la especialista en análisis del sindicato magisterial aclaró que en la actualidad es exagerado decir que la dirigencia nacional del SNTE puede determinar el sentido de los votos del millón 400 mil maestros afiliados, “eso es simplemente falso”, pero eso no significa que no intente persuadirlos con discursos de que ese voto cruzado por Nueva Alianza y por el PRI es para beneficio de los profesores.
“Por una parte puede haber coerción en lugares pequeños, donde existe control para asegurarse de que el maestro va a votar y que debe hacer campaña dentro de las escuelas en un sentido u otro”, subrayó Loyo.
Las dirigencias estatales del gremio magisterial, añadió, se basan en la coerción y en la persuasión para garantizar votos a los candidatos del Panal y asegurar alianzas con otros partidos.
Pero el SNTE rechaza tener promotores electorales y ofrecer prebendas a cambio de asegurar votos para los candidatos que las dirigencias nacional y estatal estipulan.
“El magisterio vota por conciencia y no por consigna”, subrayó el coordinador nacional del Comité Nacional de Acción Política del gremio magisterial, Gustavo Martínez Aguirre.
Si bien los docentes no son robots, Loyo dijo que existen grupos de maestros que creen en lo que sus dirigentes sindicales señalan como bueno “y entonces aceptan seguir sus instrucciones; de modo que tampoco se puede asegurar que en todas las entidades los obliguen, pero sí es muy claro “que están persuadidos con la creencia de que lo bueno para el sindicato es bueno para ellos”.
Al respecto, el director general de Mexicanos Primero, David Calderón, afirmó que persiste la intención de un manejo corporativo de la adhesión de los profesores a través de otros docentes comisionados, quienes fungen como promotores del voto en las escuelas.
En Veracruz, por ejemplo, dijo que maestros han reportado “presiones sutiles y otras no tanto, para acudir a los eventos de campaña del PRI, presentar datos y direcciones de personas (familiares o amigos) que pueden adherirse al Panal”.
En ello coincidió el especialista en educación de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Carlos Ornelas, quien también indicó que profesores le han revelado que en esa entidad ya salió la consigna desde la sección sindical, “visitan las escuelas diciendo que voten por los senadores y diputados del Panal y para presidente por Peña Nieto”, señaló el académico.
Pero Veracruz no es el único estado donde prevale la instrucción del SNTE; la misma operación política del voto cruzado también se aplica en las entidades gobernadas por el Revolucionario Institucional, aseguró el ex secretario de Educación Pública, José Ángel Pescador Osuna.
El director de Mexicanos Primero confirmó esa operación política, señalando que “esa estrategia ha estado presente en distintas partes del país”.
El SNTE no puede obligar a los maestros a asistir a mítines de candidatos, pero Ornelas y Calderón coincidieron en entrevistas separadas que sí existe la instrucción de que vayan a los eventos del Panal y del PRI, pues las dirigencias saben que los profesores no se van a negar, porque “aunque en la urna voten por otros candidatos, atienden el llamado de sus dirigentes porque temen que de no hacerlo haya repercusiones en su vida laboral”, lamentó el director de la asociación civil que preside Claudio X. González.
La académica de la UNAM insistió en que el voto corporativo ya no es posible tal como se hacía en el pasado, pero sí existe formas de coerción tanto de la dirigencia nacional como de las estatales “para conminar a los agremiados no sólo a votar, sino a colaborar en favor de determinado partido o candidato”, dijo.
En estas elecciones el sindicato va a optar por un voto dividido. “Por Peña Nieto y por los diputados y senadores del Panal, operando políticamente con su estructura para asegurar el registro de su partido; pidiendo a maestros conseguir diez votos cada uno, lo cual no es descabellado, porque hay una experiencia acumulada para lograr la persuasión y que los maestros voten por los candidatos que ellos imponen”, puntualizó.
Para el secretario de organización del Sindicato Independiente de Trabajadores de la Educación de México, Gaudencio Bravo, lo delicado del voto cruzado es que hay profesores que “siguen sometidos, subordinados, actuando conforme a la componenda, a la complicidad y al privilegio que los propios dirigentes les ofrecen para meterse a las campañas”.
En el pasado, recordó el profesor Bravo Sánchez, se decía que el trabajador pertenecía como gremio al PRI. Hoy no es así, pero “los maestros siguen siendo forzados, están siendo obligados a votar por el Panal”.
► Sindicato ya no puede negociar plazas por sufragios
Por primera vez las plazas de maestros ya no se pueden ofrecer a cambio de votos como se hizo en elecciones anteriores, aseguró el coordinador del Comité Nacional de Acción Política del SNTE, Gustavo Martínez Aguirre.
El Concurso Nacional de Plazas Docentes, cuya convocatoria se publicó ayer, lo impide por completo y en los comicios de este 1 de julio, ya que ninguno de los secretarios sindicales de los estados ni funcionarios estatales puede asegurar una plaza a un profesor que trabaja por honorarios o a un egresado de la escuela normal.
“Desde 2008 se firmó la Alianza por la Calidad de la Educación y donde a partir de esos cinco ejes, uno de ellos es el Concurso para la Asignación de Plazas y ya está en proceso para las de este año”, dijo.
“Ya nadie puede decirle ‘te doy esta plaza a cambio de que tú actúes como yo quiera’, tienen que concursarse y a nivel nacional se está avanzando y con esto se estaría cancelando la posibilidad de que alguien quisiera hacer uso de esa situación, aseveró, pese a que en algunas entidades se siguen heredando y vendiendo plazas.
Rechazó que los dirigentes de las secciones sindicales sigan aplicando prácticas de promoción laboral con los maestros a cambio de su voto a favor de los candidatos de Nueva Alianza o de otro partido político.
El ejemplo más claro de que han avanzado en evitar esas prácticas corruptas, dijo, se muestra en el concurso para obtener una plaza docente, pues a diferencia de las tres elecciones anteriores, en las de 2012 es la primera vez que un concurso por mérito impide negociar plazas por votos.
Afirmó que los egresados de las escuelas normales tienen que concursar para conseguir su plaza y nadie puede ofrecerla a cambio del voto. “Ya no están supeditados a funcionarios de la SEP ni del sindicato”, acotó.
Redacción Emet - Excélsior
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