Encuestas y la nueva táctica PRI-PAN. (Lilia Arellano)

 

Por su parte, Andrés Manuel López Obrador rechazó que existan 6 millones de votos de distancia entre él Peña Nieto, por lo que desestimó los resultados de la encuesta nacional del periódico El Universal y The Dallas Morning News

La configuración de la elección federal del próximo 1 de julio ya se inició y pretende dar como ganador indiscutible al candidato presidencial del PRI-PVEM, Enrique Peña Nieto. Luego de que en días pasados se publicaron encuestas que revelaban un virtual “empate técnico” entre el abanderado priísta y el candidato de las izquierdas, PRD-PT-Movimiento Ciudadano, Andrés Manuel López Obrador, lo que hacia prevalecer la incertidumbre sobre quien será el próximo Presidente de la República, que presuntamente se resolverá por los votantes indecisos, al iniciar esta semana dos diarios de circulación nacional publicaron dos sondeos sobre intención del voto que coinciden en lo fundamental y que nuevamente posicionan a Enrique Peña Nieto como el “puntero” en la carrera hacia Los Pinos.

El diario El Universal y The Dallas Morning News/Buendía & Laredo, dan a conocer una encuesta levantada del 11 al 15 de junio, en el que el abanderado del PRI-PVEM obtendría 43.6 por ciento de la preferencia efectiva; el candidato de la coalición Movimiento Progresista (PRD-PT-Movimiento Ciudadano), alcanzaría el 27.7 % de las preferencias, y la panista Josefina Vázquez Mota el 25.1 por ciento de los presuntos sufragios. A su vez, una encuesta de BGC-Excélsior, realizada entre el 13 y el 14 de junio, registra que Enrique Peña Nieto alcanzaría el 42% de las preferencias electorales, seguido por la panista Josefina Vázquez Mota, con el 29% y Andrés Manuel López Obrador con el 27%.

Los sondeos publicados este lunes por los diarios El Universal y Excélsior coinciden en que Peña Nieto ganaría las elecciones por una amplia ventaja, lo que no dejaría margen para que impugnaciones ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) -que llevarían a la anulación de los comicios o a cambiar el nombre del ganador de la contienda presidencial- prosperen ante la contundencia de la ventaja entre el primero y el segundo lugar. Además, permitiría realizar las acciones que se requieran para anular o desacreditar una eventual movilización opositora encabezada por López Obrador para oponerse a un nuevo “fraude electoral”.

Al conocerse el resultado de esas encuestan realizadas en los últimos días platicamos con involucrados en el proceso y resulta que la diferencia tan brutal que sostiene un candidato con el resto se debe a una estrategia que está más que clara, nos dijeron. Es necesario que se tenga un colchón que respalde y no desgaste el voto útil que seguramente brindarán los panistas a los priístas. Es decir, contar con el argumento del triunfo que no permita que se hable de que por sí solo en alianza con el Verde no se hubiese alcanzado y se descubra el número de sufragios con los que el PAN apoyo a esta causa. Visto así hasta se explica la tranquilidad y la certeza de triunfo que hoy rodea a los tricolores y queda claro el por qué de mantener los números de esas encuestas que primero fueron utilizadas como material de campaña y hoy como colchón de acreditación de triunfo con alianzas de facto.

Y, en efecto, hoy más que nunca está necesitado el priísmo del apoyo del panismo y si nos remontamos al pasado reciente encontramos que la candidata ideal era Josefina Vázquez, ya que después de que fue Ernesto Cordero quien señaló y llevó a la situación actual al ex líder nacional tricolor y ex gobernador de Coahuila, Humberto Moreira, hubiese sido cuesta arriba solicitarle “bajarse” abruptamente porque hay que devolverle sus canicas al que las prestó. No olvidemos la reforma al Artículo 82 hecha en el sexenio de Carlos Salinas y que le permitió a Vicente Fox llegar al poder y, de ello, mucho se habló del acuerdo sobre la última presidencia en ese Siglo en manos del PRI. Ante los señalamientos tan duros que han recibido los del equipo de Peña Nieto, los militantes de su partido y él mismo van pasando del desgaste de la guerra sucia a la planeación de este tipo de estrategias. Si duda de los alcances vaya a ver “Colosio, el asesinato” y sabrá de que tamaño se las pueden gastar.

Precisamente en Tamaulipas, en Reynosa, Enrique Peña Nieto además de prometer sacar “el miedo” de esa Entidad, habló de mejorar el nivel de vida y desarrollo de los trabajadores además de ofrecer, como lo hiciera López Obrador y por lo cual lo criticaron a rabiar, bajar las tarifas de luz. En otros renglones habló de que hay quienes quieren confundir a los ciudadanos y sostuvo que el programa Oportunidades fue creado por el PRI como una política social que transformaron en electorera pero que no desaparecerá, sino por el contrario lo expandirá. La temperatura en esa Entidad superó los 40 grados y así en medio de tal calor le dijo al gobernador Egidio Torre Cantú que trabajará de su lado, aunque nada expresó sobre aclarar el crimen de su hermano.

Por su parte, Andrés Manuel López Obrador rechazó que existan 6 millones de votos de distancia entre él Peña Nieto, por lo que desestimó los resultados de la encuesta nacional del periódico El Universal y The Dallas Morning News. “Yo tengo otras encuestas, la última que di a conocer me da dos puntos de ventaja y vamos creciendo y Peña Nieto va en picada”. También sostuvo que está dispuesto a firmar cualquier documento que quiera el IFE para garantizar elecciones limpias y que aceptará los resultados porque “vamos a ganar”. Sobre lo anterior, el propio Instituto Federal Electoral afirmó que es crucial que los candidatos a la presidencia firmen un pacto de civilidad.

Finalmente, Josefina Vázquez Mota, reiteró que las encuestas no votan con lo cual dejó en claro su inconformidad por ubicarse ya en el tercer lugar de la contienda y aseguró que avanza en las preferencias por lo que está viva en la competencia por la Presidencia de la República. Dijo que el proceso concluirá igual que los del 2000 y 2006 con el PAN como triunfador absoluto. Los integrantes del Colegio de Arquitectos la escucharon con atención, pero no mucha y menos aún con entusiasmo. Y es que la panista sigue haciendo el ridículo en la última fase de su campaña en donde ahora señaló que a los hombres que vayan a votar por ella sus mujeres deben darles “doble cuchicuchi”… En tanto, los consejeros del IFE celebraron que tres de los cuatro candidatos presidenciales participen en un tercer debate organizado por integrantes del movimiento “#yosoy132”, que se realizará este martes en las instalaciones de la CDHDF, aunque descartaron que el resultado de este ejercicio sea definitorio para los próximos comicios del 1de julio.

Lilia Arellano - Opinión EMET

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