#Hacienda, #Slim, #INEGI y #ABM no nos invitaron a su bonanza económica. (Lilia Arellano)

Por si lo anterior fuera poco, el secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade Kuribeña, destacó que ante la incertidumbre mundial, la estabilidad política y financiera son variables de éxito.

A pesar de este adverso contexto, el empresario más rico del mundo, el mexicano Carlos Slim, sostiene que nuestro país tiene las condiciones macroeconómicas, financieras y potenciales humanas mejores para su avance y puede convertirse en una nación desarrollada dentro de 10 ó 15 años. Al participar en la Primer Cumbre Regional de las Américas del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC por sus siglas en ingles), en Solidaridad, Quintana Roo, Slim consideró que México tiene una posición muy “sólida” en materia económica en el contexto de una crisis europea “profunda y estructural”. Dijo que se tienen las bases para que el país se convierta en una nación en la que los trabajadores mexicanos puedan registrar ingresos de 15 mil dólares en promedio en esos tres lustros. Acompañado de la titular de la Secretaría de Turismo, Gloria Guevara Manzo, y el director general del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), David Scowsill, en un hotel de la Riviera Maya, el empresario habló de la necesidad de impulsar a la actividad turística como parte de un desarrollo económico, de su propuesta para que las entradas de turistas a los países sea más “de fiesta” y de sus soluciones para resolver la crisis europea.

Slim destacó que el hecho de que los países desarrollados estén en crisis, permite ver que hay dinero barato en abundancia a largo plazo, disponible y buscando hacer mejores inversiones. Aquí, señaló que México, al igual de toda Latinoamérica, necesita grandes inversiones. Explicó que no sólo se logrará con el ahorro interno e inversión extranjera, sino que es indispensable ahorro externo disponible en el mundo para financiar todos aquellos proyectos que sean atractivos y viables, a largo plazo y a bajo precio. Manifestó su confianza de que en 10 ó 15 años se pueda acceder al desarrollo en países como Chile, Brasil, Colombia y Argentina, al igual que en México.

Todo parece indicar que millones de mexicanos no nos hemos dado cuenta de que vivimos en un país en ensueño: el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) reporta alegremente que durante los primeros tres meses de este año, el Producto Interno Bruto (PIB) del país registra un avance anual de 4.63 por ciento, el más alto de los últimos tres trimestres. También el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), José Ángel Gurría, sostuvo que México está lejos de ser afectado por la crisis que viven países de Europa como Grecia y España. Entrevistado antes del inicio de la Reunión Ministerial de Trabajo y Empelo del Grupo de los 20 (G-20), consideró que nuestro país “está en otra dimensión, con crecimiento al 4 por ciento, diría que casi en otro planeta”. Sin embargo, el funcionario que se reúne en el Hospicio Cabañas con ministros de trabajo, insistió en la importancia de concretar las reformas laboral, fiscal y educativa, entre otras, para tener avances en el desarrollo económico y social del país.

A su vez, la Asociación de Bancos de México (ABM) descartó un contagio de la crisis de Europa y aseguró que el sistema bancario “está blindado”, se encuentra “sólido” y bien capitalizado y se espera que el crédito registre un crecimiento de 15 por ciento y la cartera vencida se estabilice en 2.5 por ciento. No obstante, Nicole Reich, vicepresidenta de la ABM, advirtió que existe el peligro de que la posible salida de Grecia de la Unión Europea pudiera contagiar a economías grandes como España e Italia. También demandó a quien resulte ganador en las próximas elecciones presidencial que mantengan la estabilidad e impulsen las llamadas reformas estructurales.

Por si lo anterior fuera poco, el secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade Kuribeña, destacó que ante la incertidumbre mundial, la estabilidad política y financiera son variables de éxito. En la inauguración de la 75 Convención Bancaria, en Acapulco, Guerrero, enfatizó que desde el peor momento de la crisis a estos días, la economía de México “es 15% más grande”. A este inexplicable entusiasmo se sumó el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, quien destacó la “inflación estable, tipo de cambio estable, reservas internacionales históricas, sistema financiero estable y una férrea disciplina fiscal”, lo que hacen de México uno de los países con mejores cimientos macroeconómicos en el mundo.

Y millones de mexicanos sin darnos cuenta, tal vez por no haber sido invitados a esa bonanza económica.

Lilia Arellano