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Salvador Cosío Gaona (Jornada Jalisco)
Puntos y millones de votos… Amor en el aire… Coincidencia universitaria… La Negación de Pedro… Deslindando amor… Justicia exprés… Indolencia y cerrazón… Depresión tropical… Hartazgo del PAN
Salvador Cosío Gaona.-
Más allá de encuestas cotidianas que no son necesariamente radiografías precisas, sino sondeos aleatorios falibles, los más precisos ejercicios estadísticos a decir de expertos son realizados cuando menos cuatro días antes para procesarlos y difundirlos, por lo que los monitoreos diarios pueden no mostrar el impacto real de los últimos acontecimientos.
Realizar una encuesta certera requiere técnica y pericia, de la cual adolecen muchas encuestadoras que diariamente difunden la intención del voto. Son pocas las empresas serias que cuentan con alto nivel de confianza y muchas las emergentes, por lo que en su mayoría estas tendencias no dejan de ser parte de la propaganda electoral.
“Demotecnia”, de María de las Heras, muy prestigiada encuestadora, ubica ya a Andrés Manuel López Obrador a menos de 10 puntos de distancia de Enrique Peña Nieto, pero vale la pena señalar que en puntos y millones de votos, representa una diferencia de poco más de tres millones de potenciales electores, escenario que quizá concuerda más con la realidad mostrada en las diversas manifestaciones de rechazo y respaldo a los candidatos presidenciales.
Pasó López Obrador la “prueba del añejo” por la espontánea reacción de amor en el aire que provocó en vuelos comerciales, donde arrancó vítores y aplausos en trayectos a Reynosa y Puerto Vallarta, faenas en la que cortó oreja, rabo y hasta mondongo.
La peculiaridad de estos mítines de gran altura, es que el tabasqueño corrió el riesgo de estar propenso a la crítica en breve espacio, sin baño fácil para ocultarse como Peña Nieto en la Ibero.
Otros signos clave a tomarse en cuenta han sido el hito de manifestación pro López Obrador en una veintena de países, desde donde miles de mexicanos mostraron simpatía por el proyecto del Peje, aunado a la convocatoria de más de 100 mil personas en el Zócalo capitalino en su apoyo, mientras él se encontraba en Veracruz, o la multitudinaria asistencia en la Plaza de las Tres Culturas, donde inéditamente se reunieron Pumas y Burros Blancos, dejando atrás viejos desencuentros, mientras los felinos gritaron “huelum” y los borricos corearon “goyas”, en unacoincidencia universitaria que de manera inesperada y sorprendente congregó también a estudiantes de universidades privadas como la Ibero e Itam, entre otras.
Pedro Joaquín Coldwell, líder nacional del PRI, ni en sus más recónditas pesadillas imaginó que la pifia de llamar “porros” y “acarreados” a universitarios de la Ibero, se iba a convertir en el Talón de Aquiles del candidato tricolor, quién ipso facto, aplicó la Negación de Pedro y se deslindó de lo dicho por el dirigente partidista, presentando sus “respetos” a las “diversas expresiones” que le propinaron vergonzosa rechifla en la Iberoamericana, y que se ha replicado en diversos mítines del priísta, en rechazo al status quo, sesgo en la información, medias verdades y monopolio que impide el tránsito hacia una verdadera democracia.
Con la conformación de #YoSoy132, nació en el país una cruzada contra el actuar de algunos medios de comunicación que son repudiados por su parcialidad, perdiendo credibilidad y respeto ante la sociedad que es la única dueña de este movimiento generacional impulsado por universitarios de más de 15 instituciones públicas y privadas, que recientemente se definió como político, pero apartidista y que permanecerá vigilante no sólo de la elección, sino de lo que venga después y habrá que apoyarla.
La “respetable expresión estudiantil”, parafraseando al candidato tricolor, advirtió que el “decálogo” presentado por Peña Nieto, resulta ridículo toda vez que es un refrito de lo ya preceptuado en la Constitución General.
Destilando Amor fue el melodrama con que La Gaviota cautivó a Enrique Peña Nieto; peroDeslindando amor, sería el título de la nueva telenovela en la que el priísta se deslinda del “viejo PRI”, para erigirse cual “mesías” que corre a los usureros del templo, inmolándolo para sobre sus restos construir la nueva cara del PRI. Habrá que pedirles con “mucho respeto”, como suele reiterarlo el mexiquense, a los priístas de “la vieja guardia” que se abstengan de aparecer en sus actos de campaña, (¿y también de votar?); al cabo “ya no están para esos trotes”; y es que en su necedad por negar el pasado, Peña Nieto es el “Pedro” del siglo XXI, que se la pasa negando a todo priísta que considera mácula para su campaña, pero irónicamente rescatando los desechos que otros no quieren como el caso de Manuel Espino.
“El puntero en todas las encuestas” debería administrar su presunta ventaja, dejar de encararse con sus adversarios, acudir a foros, exigir respeto, formular propuestas viables, explicar cómo y con quién haría lo que plantea, como ya lo ha hecho López Obrador al mencionar los nombres de su posible gabinete que estaría integrado por notables de cada tema, que lo acompañan y hacen campaña con él para convencer; pero para eso se necesita estrategia, menos copete y más cabeza.
Quien diga que la justicia no es pronta, tendría que analizar el caso de Tomás Yarrington, a quien “casualmente” en plena contienda electoral le imputaron ilícitos cometidos en Estados Unidos, lo que provocó que la atingente autoridad mexicana lo procesara, al parecer, negándole el derecho de audiencia y defensa en una operación de justicia exprés que más bien huele a chivo por tratarse ahora de un “respetable ex priísta”, mientras curiosamente Humberto Moreira, señalado por gobernantes y candidatos, de peores cosas, anda por ahí muy campante.
Imbatible sigue la violencia en el país ante la ineficacia del gobierno de Calderón, y también las muestras de indolencia y cerrazón de muchas autoridades, como las que detuvieron a padres de familia por manifestar su inconformidad e impotencia ante la falta de responsables reales que se les castigue por los funestos acontecimientos en la guardería ABC; sin embargo y gracias a la presión de las redes sociales, la apática autoridad los liberó.
La tormenta Bud se deprimió y no llegó a causar afectación en las costas del Pacífico; sin embargoBud no es el único deprimido, con depresión tropical están: Josefina Vázquez Mota, quien ni haciendo “pacto” con el Diablo logrará siquiera el segundo lugar en el proceso electoral; misma suerte que correrá en Jalisco el PAN y su candidato Fernando Guzmán, quien no levantó, no levanta, ni levantará.
Es claro que el desaparecido desgobernador de Jalisco, Emilio González, quien tal vez ande de parranda, juega literalmente con Guzmán, porque todo indica que sus aprecios y simpatías están más a la izquierda que a la derecha, o al menos es lo que la gente cuenta.
Otro deprimido es el ex panista Fernando Garza, (¿será defecto llamarse Fernando?); a quien esta campaña le dejará por lo menos el conocimiento de todos los tianguis y mercados que hay en el estado; niega Garza presiones para bajarlo de la campaña, pero es evidente que en Jalisco la única izquierda que está creciendo exponencialmente es la progresista apoyada por López Obrador y abanderada en la entidad por Enrique Alfaro, quien sorpresivamente ha venido de atrás y sigue creciendo con actos como los celebrados este fin de semana, donde marcharon a su favor desde diversos puntos de la ciudad hasta la explanada del Insituto Cultural Cabañas más de 30 mil personas, aunque en los sondeos sigue punteando Aristóteles Sandoval.
La mentada de madre proferida por Emilio González se la han regresado a los candidatos del PAN, especialmente a Bebeto Cárdenas, quien lejos de contar con el arrastre esperado, batalla para conseguir votos frente a un Ramiro Hernández del PRI que con paso firme avanza en Guadalajara, como igual lo hace Héctor Robles en Zapopan, donde la candidata del PAN Maricarmen Mendoza no es rival por cargar el lastre de haber solapado como contralora estatal las pillerías de Emilio.
Queda claro que existe una ventaja del PRI en los escenarios nacional y estatal, pero latente la posibilidad de una sorpresa proveniente de las izquierdas; lo que sin duda ya es un hecho es que en la sociedad hay hartazgo de PAN y en todos los casos perderá irremediablemente la elección y quedará rezagado en la tercera posición.
Puntos y millones de votos… Amor en el aire… Coincidencia universitaria… La Negación de Pedro… Deslindando amor… Justicia exprés… Indolencia y cerrazón… Depresión tropical… Hartazgo del PAN
Salvador Cosío Gaona.-
Más allá de encuestas cotidianas que no son necesariamente radiografías precisas, sino sondeos aleatorios falibles, los más precisos ejercicios estadísticos a decir de expertos son realizados cuando menos cuatro días antes para procesarlos y difundirlos, por lo que los monitoreos diarios pueden no mostrar el impacto real de los últimos acontecimientos.
Realizar una encuesta certera requiere técnica y pericia, de la cual adolecen muchas encuestadoras que diariamente difunden la intención del voto. Son pocas las empresas serias que cuentan con alto nivel de confianza y muchas las emergentes, por lo que en su mayoría estas tendencias no dejan de ser parte de la propaganda electoral.
“Demotecnia”, de María de las Heras, muy prestigiada encuestadora, ubica ya a Andrés Manuel López Obrador a menos de 10 puntos de distancia de Enrique Peña Nieto, pero vale la pena señalar que en puntos y millones de votos, representa una diferencia de poco más de tres millones de potenciales electores, escenario que quizá concuerda más con la realidad mostrada en las diversas manifestaciones de rechazo y respaldo a los candidatos presidenciales.
Pasó López Obrador la “prueba del añejo” por la espontánea reacción de amor en el aire que provocó en vuelos comerciales, donde arrancó vítores y aplausos en trayectos a Reynosa y Puerto Vallarta, faenas en la que cortó oreja, rabo y hasta mondongo.
La peculiaridad de estos mítines de gran altura, es que el tabasqueño corrió el riesgo de estar propenso a la crítica en breve espacio, sin baño fácil para ocultarse como Peña Nieto en la Ibero.
Otros signos clave a tomarse en cuenta han sido el hito de manifestación pro López Obrador en una veintena de países, desde donde miles de mexicanos mostraron simpatía por el proyecto del Peje, aunado a la convocatoria de más de 100 mil personas en el Zócalo capitalino en su apoyo, mientras él se encontraba en Veracruz, o la multitudinaria asistencia en la Plaza de las Tres Culturas, donde inéditamente se reunieron Pumas y Burros Blancos, dejando atrás viejos desencuentros, mientras los felinos gritaron “huelum” y los borricos corearon “goyas”, en unacoincidencia universitaria que de manera inesperada y sorprendente congregó también a estudiantes de universidades privadas como la Ibero e Itam, entre otras.
Pedro Joaquín Coldwell, líder nacional del PRI, ni en sus más recónditas pesadillas imaginó que la pifia de llamar “porros” y “acarreados” a universitarios de la Ibero, se iba a convertir en el Talón de Aquiles del candidato tricolor, quién ipso facto, aplicó la Negación de Pedro y se deslindó de lo dicho por el dirigente partidista, presentando sus “respetos” a las “diversas expresiones” que le propinaron vergonzosa rechifla en la Iberoamericana, y que se ha replicado en diversos mítines del priísta, en rechazo al status quo, sesgo en la información, medias verdades y monopolio que impide el tránsito hacia una verdadera democracia.
Con la conformación de #YoSoy132, nació en el país una cruzada contra el actuar de algunos medios de comunicación que son repudiados por su parcialidad, perdiendo credibilidad y respeto ante la sociedad que es la única dueña de este movimiento generacional impulsado por universitarios de más de 15 instituciones públicas y privadas, que recientemente se definió como político, pero apartidista y que permanecerá vigilante no sólo de la elección, sino de lo que venga después y habrá que apoyarla.
La “respetable expresión estudiantil”, parafraseando al candidato tricolor, advirtió que el “decálogo” presentado por Peña Nieto, resulta ridículo toda vez que es un refrito de lo ya preceptuado en la Constitución General.
Destilando Amor fue el melodrama con que La Gaviota cautivó a Enrique Peña Nieto; peroDeslindando amor, sería el título de la nueva telenovela en la que el priísta se deslinda del “viejo PRI”, para erigirse cual “mesías” que corre a los usureros del templo, inmolándolo para sobre sus restos construir la nueva cara del PRI. Habrá que pedirles con “mucho respeto”, como suele reiterarlo el mexiquense, a los priístas de “la vieja guardia” que se abstengan de aparecer en sus actos de campaña, (¿y también de votar?); al cabo “ya no están para esos trotes”; y es que en su necedad por negar el pasado, Peña Nieto es el “Pedro” del siglo XXI, que se la pasa negando a todo priísta que considera mácula para su campaña, pero irónicamente rescatando los desechos que otros no quieren como el caso de Manuel Espino.
“El puntero en todas las encuestas” debería administrar su presunta ventaja, dejar de encararse con sus adversarios, acudir a foros, exigir respeto, formular propuestas viables, explicar cómo y con quién haría lo que plantea, como ya lo ha hecho López Obrador al mencionar los nombres de su posible gabinete que estaría integrado por notables de cada tema, que lo acompañan y hacen campaña con él para convencer; pero para eso se necesita estrategia, menos copete y más cabeza.
Quien diga que la justicia no es pronta, tendría que analizar el caso de Tomás Yarrington, a quien “casualmente” en plena contienda electoral le imputaron ilícitos cometidos en Estados Unidos, lo que provocó que la atingente autoridad mexicana lo procesara, al parecer, negándole el derecho de audiencia y defensa en una operación de justicia exprés que más bien huele a chivo por tratarse ahora de un “respetable ex priísta”, mientras curiosamente Humberto Moreira, señalado por gobernantes y candidatos, de peores cosas, anda por ahí muy campante.
Imbatible sigue la violencia en el país ante la ineficacia del gobierno de Calderón, y también las muestras de indolencia y cerrazón de muchas autoridades, como las que detuvieron a padres de familia por manifestar su inconformidad e impotencia ante la falta de responsables reales que se les castigue por los funestos acontecimientos en la guardería ABC; sin embargo y gracias a la presión de las redes sociales, la apática autoridad los liberó.
La tormenta Bud se deprimió y no llegó a causar afectación en las costas del Pacífico; sin embargoBud no es el único deprimido, con depresión tropical están: Josefina Vázquez Mota, quien ni haciendo “pacto” con el Diablo logrará siquiera el segundo lugar en el proceso electoral; misma suerte que correrá en Jalisco el PAN y su candidato Fernando Guzmán, quien no levantó, no levanta, ni levantará.
Es claro que el desaparecido desgobernador de Jalisco, Emilio González, quien tal vez ande de parranda, juega literalmente con Guzmán, porque todo indica que sus aprecios y simpatías están más a la izquierda que a la derecha, o al menos es lo que la gente cuenta.
Otro deprimido es el ex panista Fernando Garza, (¿será defecto llamarse Fernando?); a quien esta campaña le dejará por lo menos el conocimiento de todos los tianguis y mercados que hay en el estado; niega Garza presiones para bajarlo de la campaña, pero es evidente que en Jalisco la única izquierda que está creciendo exponencialmente es la progresista apoyada por López Obrador y abanderada en la entidad por Enrique Alfaro, quien sorpresivamente ha venido de atrás y sigue creciendo con actos como los celebrados este fin de semana, donde marcharon a su favor desde diversos puntos de la ciudad hasta la explanada del Insituto Cultural Cabañas más de 30 mil personas, aunque en los sondeos sigue punteando Aristóteles Sandoval.
La mentada de madre proferida por Emilio González se la han regresado a los candidatos del PAN, especialmente a Bebeto Cárdenas, quien lejos de contar con el arrastre esperado, batalla para conseguir votos frente a un Ramiro Hernández del PRI que con paso firme avanza en Guadalajara, como igual lo hace Héctor Robles en Zapopan, donde la candidata del PAN Maricarmen Mendoza no es rival por cargar el lastre de haber solapado como contralora estatal las pillerías de Emilio.
Queda claro que existe una ventaja del PRI en los escenarios nacional y estatal, pero latente la posibilidad de una sorpresa proveniente de las izquierdas; lo que sin duda ya es un hecho es que en la sociedad hay hartazgo de PAN y en todos los casos perderá irremediablemente la elección y quedará rezagado en la tercera posición.
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