Simulaciones y decisiones. (@gutierrezfalcon)

Por: Gutiérrez Falcón

Quienes diseñaron el sistema económico mundial, simularon estar en favor de la prosperidad del orbe.  Sin embargo, su estrategia fue basada en el dominio y no en el bienestar general.

México ha sido parte importante en esta historia neoliberal, la cual hemos aderezado con las malformaciones de nuestra enquistada corrupción.

Simulando una apertura a libre competencia, empresas paraestatales en nuestro país se privatizaron, para crear un capitalismo de compadres. De tal suerte, en México jamás ha existido el sistema capitalista, donde todos los empresarios, pequeños, medianos y grandes,  tengan las mismas oportunidades de invertir y de crecer.

Una gran diferencia tendríamos en México, si las redes telefónicas se hubieran puesto a disposición de cualquier número de empresas, nacionales o extranjeras, decididas a invertir en esta nación, con precios competitivos para sus clientes potenciales, y pagando una renta al estado por el uso de la infraestructura instalada.

Pero la historia fue diferente. Como si México no fuera uno de los mejores ejemplos  de concentración y pésima distribución de la riqueza en el mundo, se decidió darle toda la empresa Teléfonos de México, a un solo hombre que hoy es el más rico del mundo. Un monopolio del estado, pasó a ser un monopolio privado, como una burla a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, provocada desde la más alta esfera de poder.

En ese tenor, cada vez más se acecha de hecho y de derecho, la posibilidad de privatizar PEMEX. Los diversos contratos de PEMEX con la iniciativa privada nacional y extranjera, simulan no pasar por encima de nuestra constitución

Noruega es el tercer país más poderoso en exportaciones de petróleo. En la posguerra, los noruegos encontraron importantes yacimientos del denominado “oro negro” en sus mares. Su excelente planeación les ha permitido no ser víctimas de la mundialmente conocida “Maldición del petróleo”.

En Noruega, la empresa estatal Statoil, permite la inversión privada en la explotación del petróleo, pero el 75% de las utilidades van hacia las arcas del estado noruego. Estos recursos, se destinan a un fondo, del cual sólo sus intereses pueden ser tocados, para invertir en dos grandes rubros: 60% extranjero y 40% Noruega.

En la parte extranjera se encuentran, Japón, Asia y algunos países de América Latina. En la parte de Noruega, se contempla toda Escandinavia, conformada por Suecia, Finlandia, Dinamarca y la misma Noruega.

Todos los recursos derivados de la venta de petróleo, son administrados por el Norges Bank, el cual es el Banco Central Europeo y el acceso a esa información es publicada en tiempo real en su página de internet, con absoluta transparencia.

En los 3 últimos años del gobierno de Vicente Fox, según cifras de Fundar A.C., entraron al país $439,288 millones de pesos adicionales por venta de petróleo. El manejo de estos recursos como estos, se da en medio de la opacidad y se distribuyen sin una eficaz fiscalización entre las diversas entidades federativas.

En México al menos una tercera parte de los recursos públicos, proviene de la venta de petróleo. Los noruegos, decidieron dejar todos los sectores productivos de su país funcionando por separado, con absoluta independencia de las utilidades del petróleo.

De esta forma tan desastrosa de “administrar” PEMEX, surgen voces simulando la inminente necesidad de privatizar PEMEX. A la mexicana, ya lo hemos visto, privatizar es dejar todo de todo a los compradores, quienes han adquirido las exparaestatales a precio de venta de garaje.

Hay quienes se han atrevido a decir que el petróleo ya no es negocio. Sin embargo, el ejemplo noruego dice todo lo contrario.

En 1938, el Presidente Lázaro Cárdenas, realizó la expropiación petrolera. En 1963, los noruegos descubren los yacimientos de petróleo en sus mares. A solo 25 años de distancia y sin haber tenido jamás contacto con el sector petrolero, Noruega hoy es un ejemplo mundial de lo que se puede lograr, y México es un referente mundial sobre lo que no debe hacerse.

Las elecciones federales del 2012, serán determinantes para seguir viviendo entre simulaciones, o para avanzar hacia un desarrollo económico real.

Se puede entender la economía de mercado global y participar en ella, sin dejar de ser patriota.

@gutierrezfalcon