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Policías de Mérida descuidan su trabajo para estar al servicio de melodrama de Televisa. (Claudia Rodríguez)
Mas si el alcalde de Mérida hizo un trato con Televisa, podemos tener una explicación más de porque en nuestro país la seguridad es cosa de ricos y pudientes. Los Consejos, los discursos y los reclamos lucen pero no pagan.
Uno de los puntos torales del sistema de seguridad pública nacional, es la preparación y la participación de los elementos policiacos en la ayuda y protección a la ciudadanía, pero pese a que el señor Felipe Calderón advirtió que la garantía de seguridad pública no debe tener color ni partido, todo indica que en la práctica no se estila lo señalado.
Me parece patético que el ayuntamiento de Mérida, Yucatán, asigne varios elementos policiacos para cuidar el físico de un elenco de telenovela, mientras que para realizar un operativo para inhibir el robo de autos en el centro de la misma ciudad, apenas si se destaquen algunos elementos.
El alcalde de Mérida, Álvaro Omar Lara Pacheco debe estar enterado que al menos 30 elementos de la policía a su cargo están por el momento metidos a la farándula.
En la hermosa ciudad de Mérida se filman escenas del melodrama de Televisa conocido como Abismo de Pasión y para la protección de los actores se cuenta nada más y nada menos, que con elementos de la policía que atajan a los admiradores de quienes graban la telenovela para que los meridenses no se les acerquen o lleguen a dañar físicamente. Pero justo en el centro de Mérida, se reportan últimamente varios robos de vehículos para lo que apenas hace unos días se hizo un operativo-recorrido con apenas unos elementos de seguridad. ¿No sería mejor destacar a los elementos de protección a que cuiden los carros de los tenedores de Mérida en lugar de que cuiden a los que cobran en Televisa?
Se entiende que las locaciones en diferentes partes del país promueven el turismo. Pero es inexplicable que estando la situación de inseguridad como está, los policías municipales dejen sus deberes para con la gente de Mérida y se pongan a las órdenes y protección del equipo humano de una empresa privada.
Mas si el alcalde de Mérida hizo un trato con Televisa, podemos tener una explicación más de porque en nuestro país la seguridad es cosa de ricos y pudientes. Los Consejos, los discursos y los reclamos lucen pero no pagan.
Y el tema sigue siendo la seguridad.
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Claudia Rodríguez - Opinión EMET