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Fotografía: especial
Pese a ello, Elena Cepeda de León, secretaria de Cultura del Distrito Federal y esposa del senador perredista, hizo uso de la tribunal del Poder Legislativo de Morelos, desde donde dijo sentirse orgullosa de participar en un gobierno de izquierda y de vanguardia e invitó a todas las presentes “a que exijamos que, con una agenda de género, logremos un estado de Morelos progresistas y de vanguardia”.
Esta decisión fue avalada por las diputadas Lilia Ibarra Campos, Zaira Fabela Beltrán, Jovita Herrera Gutiérrez, Cecilia González López (PRI), Juana Barrera Amezcua (PAN) y Alejandra Vera Chávez (PVEM), los coordinadores parlamentarios Omar Guerra Melgar, Luis Miguel Ramírez Romero y Othón Sánchez Vela, así como el presidente de la Mesa Directiva, el priísta Julio Espín Navarrete.
Las legisladoras, en voz de la priísta Lilia Ibarra, precisaron la presidenta de la Comisión de Equidad de Género, la petista Tania Valentina, les ocultó el nombre de la oradora de la sociedad civil que expondría las conclusiones de los foros regionales previos al Parlamento de las Mujeres; asimismo, resaltaron que existen mujeres morelenses que si participaron el éstos y que gozan del respaldo de sus compañeras de género y que están hechas en la lucha social.
Dejó en claro que no tienen nada en contra de Elena Cepeda, pero no pueden dar cabida a que se de una situación de “partidización” del Parlamento de las Mujeres y de la tribuna del Congreso del estado; asimismo, lamentaron que Tanía Valentina Rodríguez no haya consensuado el nombre de la oradora y que pretenda sorprender a los legisladores trayendo a la esposa del candidato a gobernador de los partidos de izquierda.
Por su parte, Hortencia Figueroa Peralta, coordinadora del Grupo Parlamentario del PRD, calificó el hecho como una acción de misoginia y sostuvo que Elena Cepeda tiene suficientes argumentos para hablar en el Parlamento de las Mujeres, por lo que su condición de ser esposa del candidato de las izquierdas no la descalifica.
Acusó a sus compañeros de no respetar compromisos y ni a las cientos de mujeres asistentes a la apertura del Parlamento. “Es un agravio para todas”, concluyó.
Pese a lo anterior, la petista Tania Valentina Rodríguez tomó la tribuna del Congreso del estado para darle la voz a la esposa de Graco Ramírez, no sin antes denunciar que sus compañeros de otros partidos decidieron cancelar el parlamento. La respuesta de las asistentes fueron gritos de apoyo a Elena Cepeda y de repudio al Partido Revolucionario Institucional: “Ni un voto al PRI, ni un voto al PRI”.
Ante este hecho, la presidenta del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia, Mayela Alemán de Adame, abandonó de inmediato el recinto legislativo; lo mismos hicieron otras representantes de instituciones, salvo las del Instituto de la Mujer, IMIPE y CDHEM.
Cabe señalar que avalaron la toma de la tribuna los diputados Fidel Demédicis Hidalgo, Rabindranath Salazar Solorio (PRD), Jessica Ortega de la Cruz (Movimiento Ciudadano) y Luis Arturo Cornejo Alatorre (independiente). Ello ante la complacencia de Graco Ramírez, quien estuvo más de dos horas en el Congreso local.
Elena Cepeda sostuvo “Morelos debe tener un Congreso y un gobierno de vanguardia que se distinga por reconocer que la equidad debe ser el futuro de nuestra sociedad incluyente y libertaria, respetuosa de los derechos humanos de todas las personas, que nos permita vivir en armonía”.
Entrevista por los medios informativos al finalizar el evento, Elena Cepeda indicó que la invitación a participar en el Parlamento de Mujeres le fue hecha en reconocimiento a su trayectoria profesional y no por ser esposa de Graco Ramírez, y que los diputados tendrían que ser los primeros en defender el derecho de expresión de las mujeres.
“Desafortunadamente la cultura de la misoginia prevalece, a las mujeres nos ha costado mucho trabajo empoderarnos y todavía a muchos hombres les ha costado mucho trabajo reconocernos”.
Agregó que no hay sociedad democrática y progresista que no centre sus políticas públicas en las mujeres, y que eso pasa por elegir libremente a quienes nos representan.
Graco Ramírez, en entrevista, lamentó que el Congreso de Morelos esté secuestrado por el PRI. “Está secuestrado por una mayoría que le interesa el poder y no la libertad de los morelenses. Es un acto de intolerancia y misoginia, no tienen ningún compromiso con las mujeres ni con la libertad de expresión”, dijo.
Redacción Emet - La Jornada