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Cuauhtémoc Cárdenas, asistió a la proyección del documental en competencia El ingeniero, de Alejandro Lubezki, en la 27 edición del Festival Internacional de Cine de Guadalajara
Para él, “es grave la forma como están decidiendo las candidaturas”, sobre todo en el PRD. “Me parece que deben cuidar sus candidaturas en términos generales”, agregó.
Aclaró que no hace pronósticos de quién va a ganar “porque en este momento todos los candidatos que están participando en las elecciones tienen la posibilidad de ganar y todos tienen también, desde luego, la posibilidad de perder”.
Sin embargo, deseó que triunfe el candidato presidencial de su partido y los que aspiren a integrar el Congreso.
Espera que el 1 de julio se celebre aquí en Jalisco el triunfo de Enrique Alfaro, el aspirante perredista.
Al pedirle su opinión sobre Manuel Bartlett, quien en 1988 fue responsable de la “caída del sistema” y ahora aspira a una posición en el Senado cobijado por la izquierda, expresó que “más allá de películas, documentales y grabaciones”, sería muy sano que el exsecretario de Gobernación y exgobernador de Puebla platicara cuál es su versión de los hechos:
“No sólo de sus responsabilidades, que seguramente las cumplió, las que tenía él formalmente, sino cómo vivió aquellos días, qué sabe de esos días, qué sabe de lo que hicieron o no otras personas, qué sabe de las instrucciones que dio el entonces presidente de la República, a quien se las haya dado en relación al manejo del proceso electoral.
“Me parece que sería muy sano para el país, muy interesante para mí y, seguramente, otros que vivimos directamente estos acontecimientos, saber cuál fue el papel, cómo vio y cómo vivió en detrimento más allá de sus funciones oficiales al entonces secretario de Gobernación. Y que ahora sea candidato, me preocupa más la rebatinga en el PRD.”
Lubezki, hermano del fotógrafo Emmanuel, quien ha sido nominado en cinco ocasiones al premio Oscar, dedicó 12 años de vida a esta cinta. Siguió con cámara de video en mano al político desde el verano de 1999 hasta después de las elecciones federales de julio de 2000, con lo cual obtuvo 300 horas grabadas y realizó una película de dos horas, donde retrata el viaje personal de Cárdenas Solórzano durante su tercera campaña presidencial.
La intención del realizador, dijo, “es tener un documento histórico que provoque a la reflexión”.
Cárdenas Solórzano felicitó a Lubezki por el trabajo realizado. En la cinta, contó Cárdenas, se incluyen “las juntas, no diría secretas, pero sí discretas donde estaban discutiéndose los pasos que deberían de darse en una campaña política que iba en busca de un triunfo electoral, donde eran importante en muchos casos que los adversarios no supieran lo que se estaba discutiendo y por donde íbamos a enfocar nuestras acciones. Se ve trabajo en oficinas, recorridos de campaña, discursos, eventos públicos con los otros candidatos, en fin”.
Al preguntarle Cárdenas Solórzano cuál sería su película ideal respecto al país, señaló: “Es una que no reflejara el desastre que estamos viviendo, sino que reflejara la superación de este desastre, si lo social y lo económico se pudiera administra para todos, si hubiera desarrollo y oportunidad para todos, pero creo que todavía estamos lejos de poder grabarla”.
Sugirió que para mejorar al país, el ciudadano debe seguir participando desde las trincheras en las que pueda:
“De acuerdo también con las ideas que cada quien tenga. No se trata de imponerle a nadie ideas que no tiene o situaciones por las que no está pasando. Me parece que lo primero es no quedarse callado frente a cualquier situación que uno considere inadecuada, inconveniente, injusta, etcétera.
“Tratar de organizarse, si es posible, con aquellos con los que se encuentren afinidades y, como digo, tratar de participar ya sea en partidos políticos, organizaciones sociales, en la vida de trabajo, la vida académica, en donde lleve a cabo sus actividades principales, en la propia familia”, concluyó.
Redacción Emet - Proceso