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Los misteriosos caprichos gringos (Apocalipsis316)

Los misteriosos caprichos  gringos
A ver, simplemente no entiendo, le dan al Gobierno Mexicano millones de dólares para combatir al crimen organizado; pero por otro lado, proveen de armas a los criminales que quieren que el Gobierno combata



6 de diciembre de 2011, se publica en el portal de la cadena "Univisión", en su sección de noticias: "El presidente de la Comisión de Seguridad del Senado, Felipe González, pidió el martes al gobierno del presidente Felipe Calderón dar al congreso los informes en su poder sobre operaciones contra el lavado de dinero realizadas por la agencia estadounidense antidrogas en México." ¡Caramba con la noticia! Como siempre, al salir este tipo de cosas irregulares a la luz, pues nunca falta el que se hace el tonto; y el portavoz adjunto del Departamento de Estado, Mark Toner, sin responder directamente al cuestionamiento de si agentes de la DEA están implicados en el lavado de dinero en territorio mexicano, al amparo de la lucha contra el crimen, solo se remitió a contestar (según nota de "ABC.es", con misma fecha): "La Dirección Estadounidense Antidrogas (DEA) trabaja con las autoridades mexicanas desde hace años para reunir y usar información sobre estas organizaciones criminales con el fin de enfrentar las amenazas que presentan para nuestros dos países ... Estas operaciones están completamente coordinadas con México, y la DEA tiene mecanismos bien establecidos para coordinar y aprobar las actividades asociadas con la lucha contra el lavado de dinero." Si este amigo asegura que las operaciones están completamente coordinadas, cabe preguntar: ¿Hasta donde llega tal coordinación? ¿Acaso la lucha contra el crimen organizado en México, mas que ser un acto de impartición de justicia y reestablecimiento del orden, es literalmente, un asalto promovido por personajes de ambos gobiernos, para que algunos funcionarios puedan allegarse los vienes acumulados por los cárteles de la droga?.
A lo anterior se suma el ya sonado caso del operativo "Rápido y Furioso", del cual publicaba "suite101.net", el día 8 de marzo de 2011: "Autoridades federales de los EEUU permitieron el paso durante 15 meses de cerca de 2.000 armas hacia México, como parte de un operativo que fracasó." Desde 2009, agentes de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (BAFT, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos, proveyeron de armas a grupos criminales de México; con la supuesta excusa de que era para rastrear los movimientos de dichos grupos, a través del rastreo de las armas ingresadas... Al final no pudieron rastrear las armas que ingresaron al Territorio Nacional, por lo que se consideró que operativo falló... ¿Acaso para rastrear a un gato, le das un ratón, para ver si después puedes rastrear al ratón? ¡Vaya idiotez! ¡Evidentemente no! Lo que se puede pensar es que el objetivo de ingresar esas armas al País, era otro. Ahora cabe preguntar ¿Acaso el operativo "Rápido y Furioso" ha sido el único de este tipo? Probablemente no, lo único que pasa con este operativo en especial es que se descubrió, pero de que puede haber más situaciones como ésta del tráfico de armas desde los EUA, con autorización del gobierno gringo, es totalmente posible ¿Acaso los Estados Unidos, quieren fortalecer a los grupos criminales para hacer más sangrienta la lucha contra el crimen organizado, y sostener la hipótesis del peligro que representa México, para la seguridad interna de los EUA?.
... Por lo visto estos gringos quieren ganar por los dos lados, aprovechando la Guerra del Calderón, ganan por la venta de armas a los criminales y ganan a través del lavado de dinero en nuestro territorio; y sin embargo, todo este relajo es sólo la punta del iceberg... ¿Qué más quieren obtener los gringos, de la desestabilización que están promoviendo en nuestro País? No lo sabemos ahora, pero el tiempo se encargará de desenmascarar las verdaderas intenciones y de desvelar sus misteriosos caprichos, y mientras ellos ganan, nosotros ya hemos perdido... Nuestra Soberanía, y 50,000 almas (y contando) no es poca cosa.
José Manuel de la Huerta - Opinión EMET