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Cualquiera puede equivocarse al citar un libro. Sin embargo no solo hay errores o deslices al hablar por desconcentración o ligerezas, sino deslices Freudianos
“El Inconsciente está estructurado como un lenguaje”
Jacques Lacan
Cualquiera puede equivocarse al citar un libro. Sin embargo no solo hay errores o deslices al hablar por desconcentración o ligerezas, sino deslices Freudianos, se dice en inglés, expresión sintomática de un malestar mayor. El caso del error del candidato del PRI -el candidato de televisa, según se le nombra y se sabe secreto a voces que todos saben- Enrique Peña Nieto para nombrar adecuadamente 3 libros que supuestamente han marcado su vida (La Biblia, La silla del águila, etc.)
Ciertamente equivocarse sobre datos bibliográficos le puede suceder a cualquiera, en tanto que seres hablantes atravesados por el lenguaje.
Recuerdo otra experiencia en donde un Secretario de Estado, Carlos María Abascal Carranza cometió un lapsus por demás revelador de la coyuntura política de aquel entonces (“Lapsus de un secretario de Estado: crónica de cómo el inconsciente se articula entre dos. Ramírez Garza, C. 6/12/11 http://camiloramirez-garza.blogspot.com/2006/12/lapsus-de-un-secretario-de-estado.html) además de, por supuesto, la muy nutrida creatividad de deslices del ex presidente Vicente Fox (Cfr. Bustamante, Andrés ¿Y y por qué?, Bustamante, Andrés ¿Y por qué yo no?) Sin embargo, lo que llama la atención en el caso de Enrique Peña Nieto es la forma en la que responde y encara –él y su partido- a las críticas: borrando tweets, desapareciendo el TT (Trending topic) del hastagh #LibreriaPenaNieto que contabiliza las apariciones de una temática específica, así como borrando las cuentas del twitter de su hija y del novio de esta, en el RT que ella le dio a su novio José Luis Torre “Un saludo a toda la bola de pendejos, que forman parte de la prole y sólo critican a quien envidian” Finalmente en otra cuenta @Pau_95Pena ella se disculpa diciendo: “Quiero ofrecer una disculpa de todo corazón. Mi intención con ese RT jamás fue ofenderlos. Reconozco que hice mal y lo lamento”
En ese sentido tanto el novio, la hija de Peña Nieto y el mismo Peña Nieto con sus estrategias para “disminuir los daños” ´- sabiéndolo o no- nos muestran a todas luces al aparato priísta en funcionamiento y a todo su esplendor: equivocándose, ofendiendo, dañando, para después ocultar, borrar, censurar, tergiversando, así como pidiendo perdón, esperando que al colocarse en la posición de victimas, todo será finalmente olvidado, pues “la prole” posee poca memoria, pues las lágrimas, disculpas y excesivas muestras de “arrepentimiento” son una estrella más del canal de las estrellas. Sin darse cuenta que al ocultar o intentar borrar, más se muestra.
El error no esta en hacer el pozo, sino en cómo se tapa. Errar es de humanos, en tanto que seres hablantes, sin embargo en las respuestas Enrique Peña Nieto evidenció que la experiencia probada y la nueva actitud, nada. Más bien experiencia probada en “Caídas de sistema” pues dónde quedó el TT de #LibreriaPenaNieto ¿Por qué se dejaron de contar sus apariciones, así como las boletas del 88, en la caída del sistema cuando Carlos Salinas de Gortari “ganó” la presidencia, al más puro estilo del atajo, robándole la presidencia a Cuauhtémoc Cárdenas, estrategia que Roberto Madrazo, dándose un madrazo, emplearía en el maratón de Berlín del 2007?
Camilo Ramírez Garza / @CamiloRamirez_ - Contenidos EMET